La integración del comercio internacional en América del Norte continúa avanzando, y las empresas están buscando aprovechar los beneficios que México tiene para ofrecer. Con el aumento de los costos laborales y de transporte en China, las continuas guerras comerciales, la guerra en Ucrania y las crecientes preocupaciones sobre la resiliencia en diversos mercados, muchas cadenas de producción se han visto afectadas. Como resultado, el nearshoring se ha convertido en una alternativa idónea y México se ha convertido en un punto focal de las discusiones de empresas multinacionales. Esto es especialmente cierto para las empresas estadounidenses, dada la ubicación estratégica de México, sus costos laborales más bajos, su mano de obra calificada, su infraestructura, la amplia gama de acuerdos de libre comercio que tiene celebrado con otros países y su sólida perspectiva económica.
Hoy en día, México es el segundo socio comercial de Estados Unidos por volumen de bienes. En 2022, el comercio bilateral de bienes entre ambos países fue de EUA$779.3 mil millones, un aumento del 15.21% con respecto a 2021, convirtiendo a México en el segundo mercado de exportación más grande de Estados Unidos. La inversión extranjera directa (IED) en México aumentó un 12% en 2022 a EUA$35.29 mil millones, y los Estados Unidos continúan siendo la principal fuente de IED en México, contribuyendo con el 42.5% de todos los flujos de entrada a México.
Principales Ventajas del Nearshoring en México
La ubicación estratégica de México permite un acceso fácil a la industria y al mercado estadounidense, ofreciendo una ventaja competitiva incomparable en el mercado global a través de su capacidad para aprovechar la tecnología avanzada de Estados Unidos con una mano de obra calificada a bajo costo en México. El país comparte 1,954 millas (aproximadamente 3,145 km) de frontera terrestre con Estados Unidos, el cual constituye un mercado clave para muchas empresas internacionales. Esto significa que las empresas pueden aprovechar dicha cercanía con sus clientes en Estados Unidos, a fin de reducir tiempos y costos de envío.
Derivado de su proximidad con Estados Unidos, el Nearshoring en México permite contar con tiempos de entrega más cortos, lo que puede resultar en ahorros de costos y una mayor satisfacción por parte de clientes. Asimismo, la proximidad de México con Estados Unidos proporciona ciertas ventajas sobre fletes provenientes de China, ya que al existir menos puntos de contacto, esto se traduce en menos complejidades y riesgos. Al establecer operaciones en México, las empresas estadounidenses pueden acortar su cadena de suministro y fomentar una comunicación más cercana con sus equipos en planta.
Los costos laborales en México son generalmente más bajos que en Estados Unidos, lo que lo convierte en una opción atractiva para las empresas que buscan reducir sus costos operativos. El salario mínimo en México actualmente es de alrededor EUA$1.50 por hora, el cual es más bajo que en muchos otros países, y en 2020 el costo laboral promedio de fabricación en México fue de EUA$4.80 por hora, en comparación con EUA$6.50 por hora en China.<br>
Con una fuerza laboral altamente educada y motivada que posee una amplia gama de conocimientos específicos de diversas industrias, desde manufactura e ingeniería hasta contabilidad y finanzas, las empresas pueden lograr ahorros de costos sin comprometer su productividad o calidad. Asimismo, establecer operaciones de fabricación en México proporciona el beneficio adicional de retener al personal estadounidense en áreas clave o estratégicas, incluyendo puestos administrativos, de investigación y desarrollo, de almacenamiento y acabado de productos.
Otra ventaja de establecer operaciones comerciales en México es la capacidad de poseer, administrar y controlar sociedades de nacionalidad mexicana y sus operaciones. Esto incluye el derecho a adquirir la propiedad de tierras y edificios para establecer operaciones industriales tanto en las zonas fronterizas como en el resto del país lo que permite a las empresas tener un mayor grado de control sobre sus operaciones y activos, y adicionalmente obtener financiamiento en México.
México cuenta con una infraestructura de transportación y logística sólida y bien establecida que facilita las actividades empresariales al simplificar el transporte de bienes y materiales hacia y desde el país. Además, los procedimientos simplificados de despacho aduanero entre Estados Unidos y México mejoran aún más la comodidad y velocidad del comercio transfronterizo. Estas ventajas pueden ser especialmente valiosas para empresas que necesitan mover grandes volúmenes de bienes de manera eficiente y confiable. Como ejemplo, transportar bienes desde México a Nueva York puede tomar alrededor de 6-12 días, mientras que ir de Shanghái a Nueva York puede tomar alrededor de 35 días. De México a Los Ángeles son 4 días, mientras que de Shanghái a Los Ángeles son de 22 a 26 días.
Aunque las carreteras mexicanas han experimentado una mejora significativa en las últimas décadas, aún existen áreas con carreteras y puentes limitados y persisten preocupaciones de seguridad en ciertas regiones. Los ferrocarriles ofrecen una opción de transporte más lenta pero algo más confiable a la frontera, con planes de infraestructura en marcha para hacer mejoras significativas en la infraestructura ferroviaria en beneficio de los fabricantes y distribuidores de América del Norte.
México cuenta con una de las redes de acuerdos y tratados de libre comercio más amplias del mundo, lo que permite a las empresas provenientes de Europa, América Latina y Asia exportar bienes a los mercados estadounidenses y canadienses, y así disfrutar de los muchos beneficios del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), sucesor del TLCAN.
México actualmente goza una oportunidad única, lo que lo convierte en una opción atractiva para las empresas que buscan reubicar sus operaciones a fin de mantenerse competitivos en el mercado global. Para las empresas internacionales, especialmente las empresas estadounidenses, que buscan reubicar sus negocios, México constituye una opción altamente atractiva en vista de su ubicación estratégica, sus costos laborales más bajos, su mano de obra calificada, su robusta infraestructura, la amplia gama de acuerdos de libre comercio que tiene celebrado con otros países y su sólida perspectiva económica. Al comprender las consideraciones legales aplicables y aprovechar los beneficios que México tiene para ofrecer, las empresas internacionales pueden mantenerse competitivas en el mercado global.